
Crear una relación intercultural exitosa: Parte 2
Viviendo en este país, es muy probable que hayas conocida a gente de varios trasfondos étnicos y culturales. Y si eres tan afortunado, ¡puede que te enamores de una de estas personas! Quizás te estarás preguntado qué puedes hacer para asegurar el éxito para tu relación, ya que tú y tu pareja seguramente tienen algunas perspectivas diferentes. Bueno, ¡estás en el lugar correcto! Aquí está la parte dos de nuestros consejos para desarrollar una relación intercultural feliz y exitosa. Si no lo has hecho ya, ¡revise el parte uno aquí!
Enfócate en lo que tienen en comúnSí bien es importante abordar y abrazar las diferencias culturales que tienen, no te olvides de que tú y tu compañero sí tienen algo muy importante en común: ¡su relación! No importa qué tan diferentes sean ustedes—se escogieron el uno al otro, y son del mismo equipo. La mayoría de las personas son atraídas a sus parejas debido a las similitudes que tienen, y las parejas interculturales no son una excepción. Aunque tengan distintos días festivos, idiomas, o países de origen, es probable que se parezcan en cuestiones de la personalidad, los valores, o los intereses.
La investigación ha sugerido que las parejas pueden aumentar la satisfacción y la estabilidad de su relación cuando se enfocan en lo que tienen en común. Hay muchas maneras de hacer esto. Por ejemplo, podrían hablar de los valores que ambas culturas atesoran, e incluirlos en la cultura de su relación. ¡O consideren pasar tiempo haciendo los pasatiempos que ambos disfrutan!
Además de los valores y los pasatiempos, una pareja exitosa necesita tener unas metas en común. Una investigación sobre las metas relacionales encontró que la cultura puede influir cómo un individuo define el éxito en una relación (tal cómo uno define o expresa el amor, o cómo maneja el conflicto). Habla con tu pareja acerca de lo que esperan de la relación. Al establecer unas metas comunes, tú y tu compañero edificarán la confianza y la unidad que tienen y se asegurarán de estar trabajando hacia el mismo fin.
Crea un sentido de “nosotros”Otra manera de aumentar la unidad que sienten en tu relación es establecer un sentido de “nosotros.” En una investigación que analizó unas estrategias para lidiar con las dificultades interculturales, el sentido de “nosotros” ayudó en particular a las parejas que enfrentaban prejuicios raciales o dificultades con sentirse aceptadas por familiares. Es especialmente importante comunicar el “nosotros” a los demás, aunque requiera que hagas frente a familiares o amigos para defender tu relación o tu pareja.
Intenta crear oportunidades para conocer bien a la familia de tu pareja, y que él o ella también conozca la tuya. Felizmente, muchas personas en relaciones interculturales han comentado que el prejuicio cultural o racial mayormente se disminuye cuando sus familiares empiezan a relacionarse y conectarse bien con su pareja. Si sientes que los demás todavía no les dan el apoyo que quisieras, acude a los que sí son solidarios—quizás unos amigos, o una terapista profesional—para que recibas el respaldo que necesitas.
Haz lo que funcione para tu relaciónCuando consideras qué tan involucrado quieres estar en la cultura de tu pareja, recuerda al final que no hay una sola manera correcta de hacerlo. Hay que ser flexibles para explorar varios modos de coexistir culturalmente, pero ¡tienen la oportunidad de crear su propia cultura al descubrir lo que funcione para ustedes!
Una investigación identificó tres estructuras funcionales que ayudan a las parejas interculturales a llevarse bien a pesar de sus diferencias culturales. La primera manera de combinar las culturas es integrarlas. Esto significa dejar espacio para dos voces culturales—escoger sus partes favoritas de cada cultura y combinarlas para crear una tercera cultura que es únicamente de ustedes.
Otro método es el de coexistir, lo cual todavía incluye un respeto para ambas culturas, pero no espera que una pareja activamente participe en la cultura de la otra. En otros casos, puede que una pareja se sienta más cómoda y feliz asimilando a la cultura de la otra, tal vez porque es la cultura del país en el que viven. Si eso funciona para tu relación, ¡está bien! Lo que más importa es que trabajen juntos para crear un ambiente en que ambas parejas se sientan escuchadas y celebradas.
Un consejo más: al establecer cómo se interactúan ambas culturas, toma tiempo de hablar con tu pareja en cuanto a los roles que desempeñarán cada uno en la relación. Muchas culturas tradicionalmente proponen papeles de género muy fijos, y expectativas distintas pueden conducir al conflicto. Habla de cómo fueron los papeles en tu familia de origen, y como quieres que sean en tu relación. Y aunque no sea tradicional, considera favorecer la igualdad. Mucha investigación ha indicado que las parejas interculturales que establecen roles de género más igualitarios—a pesar de sus trasfondos culturales—son más propensos a resolver el conflicto de manera saludable.
¡Diviértete!
Para ahora, ¡esperamos que te hayas dado cuenta de que ser parte de una relación intercultural es algo muy especial! Y más que eso—tú también eres especial. El hecho que te metiste en esta relación probablemente quiere decir que ya eres más adaptable y abierto a las diferencias que otros. Esos atributos te ayudarán a navegar las diferencias de las relaciones románticas.
Y la verdad es, todas las parejas tienen sus diferencias, no solamente las interculturales. Todos tienen que aprender a manejar las dificultades con amor y comprensión, y si se esfuerzan, tú y tu pareja pueden aprender a hacer esto igual de bien que otras parejas.
Por último, ¡no te olvides de divertirte! Tener más de una cultura en tu relación es algo muy genial. Tienes una maravillosa oportunidad de crecer como persona al volverte más flexible y expandir tu manera de ver el mundo. Ama a tu pareja por la persona que es, ríete de las diferencias que enfrenten, y disfruta la aventura de descubrir la perfecta mezcla cultural que funcione para ustedes.
Emily Thurman fue la autora primaria por este blog.