
Hablar y escuchar: ¿la comunicación es realmente así de fácil?
La comunicación es parte esencial de las relaciones y no siempre es fácil. Algunas personas pueden encontrarse en el frustrante ciclo de mencionar preocupaciones o problemas en conversaciones con su pareja que nunca parecen llegar a ningún lado. Si te identificas con esto, podrías considerar usar la técnica del hablante-oyente. Esta es una técnica de comunicación desarrollada por el Dr. Howard Markman y el Dr. Scott Stanley, que se utiliza en sus excelentes programas de mejora de relaciones. Y la mayoría de los programas de mejora de las relaciones enseñan algo similar.
Para usar esta técnica, elige un problema a abordar. Para practicar, elige un problema que no sea muy emocional o que no te haya frustrado mucho en el pasado. Aprende la técnica antes de sumergirte en una conversación más desafiante. Una persona será el hablante, quien planteará un problema. Su pareja será el oyente, quien buscará entender el problema. Luego, cambien los roles. Estos son los roles del hablante y oyente:
ROL DEL HABLANTE
Tómate un tiempo para pensar en lo que quieres decir
Puedes sentirte tentado a afrontar un problema en el momento en que surge. Para responder de manera cuidadosa, tómate un tiempo para considerar lo que quieres decir. Pregúntate: ¿Qué quiero lograr al mencionarle esto a mi pareja?
No te salgas del tema
A veces es tentador mencionar cada preocupación, queja o molestia cuando finalmente tienes la oportunidad de abordar un tema. Esto puede ser abrumador y hace que sea casi imposible que la conversación sea productiva. Mantente enfocado en el problema original para obtener los mejores resultados.
Pídele a tu pareja que repita lo que ha entendido
Haz una pausa periódicamente durante la discusión para permitir que el oyente resuma lo que te escuchó decir. Si tu pareja puede repetir las ideas principales de lo que acabas de decir, ambos sabrán que entiende lo que estás tratando de comunicar. Si no entiende o malinterpreta algo que has dicho, podrás detectarlo y corregirlo antes de que empeore el problema. Recuerda que los malentendidos ocurren todo el tiempo en la comunicación, ¡es normal!
Usa afirmaciones con “yo”
En lugar de decir, “Tú siempre _____” o “Tú nunca____”, intenta decir: “Yo siento que____cuando tú____”. Acusar a las personas les hace ponerse a la defensiva y hará que tu conversación sea aún más difícil. Decirle a tu pareja cómo se siente le da a la conversación una mejor oportunidad para avanzar.
ROL DE OYENTE
Escucha sin pensar en cómo responderás
¡Como oyente, tu deber es escuchar! Tendrás la oportunidad de plantear tus propios problemas más adelante, pero ahora tú y tu pareja van a abordar un solo problema. Esto hace que el proceso sea menos abrumador para ambos. Si te estás enfocando en defender tus propios puntos o planear una solución al problema, no estás escuchando por completo.
Toma nota de las ideas principales
Tu trabajo como oyente es entender. Piensa en lo que tu pareja está tratando de decirte. Puedes hacer una nota mental de lo que está diciendo o incluso escribirlo en un papel si eso te es útil. Resúmele periódicamente al hablante lo que estás escuchando decir.
Recuerda que no puedes decirle a alguien cómo se siente
Créele a tu pareja cuando te diga cómo se siente. Si desestimas los sentimientos de tu pareja, interrumpirá el flujo de tu conversación. Intenta decir: “Puedo entender por qué eso es frustrante” o “Veo que estás triste y eso me entristece”.
Recuerda: una buena comunicación es un desafío y tomará tiempo y práctica mejorar. Trabajen juntos mientras se esfuerzan por tener una mejor comunicación. Si este método se siente abrumador en este momento, elige un aspecto en el que puedas trabajar con tu pareja. Intenta enfocarte en un problema por conversación o establece como meta usar afirmaciones con “yo” al abordar un problema. Y si sientes que esta técnica es poco natural, bueno... ¡lo es! No es cómo usualmente nos comunicamos. Pero es la forma en que podemos aprender a comunicarnos mejor. En realidad, toda esta técnica simplemente te está ayudando a desacelerarte y calmarte mientras hablas sobre desacuerdos o conflictos, algo que la mayoría de nosotros necesita practicar para mejorar.
Practicar estas habilidades resultará en buenos hábitos de conversación. La comunicación no es simple, pero puedes aprender formas para mejorarla. ¡Encuentra más ideas increíbles para mejorar la comunicación aquí!