
¿Quieres mejorar tu relación? Empieza por ti
Claro, las relaciones románticas pueden ser difíciles a veces. Aunque no son un paseo por el parque, hay formas en las que podemos mejorar las relaciones y el papel que desempeñamos. Las relaciones son de dos vías y ambas partes desempeñan un papel en el funcionamiento de la relación. Aunque puede ser fácil culpar al otro cónyuge, observar primero tu propio comportamiento puede ser un enfoque más efectivo para iniciar un cambio. En este blog, discutiremos sobre cuatro comportamientos diferentes que puedes cambiar para tener una relación más saludable.
Culpa frente a autoreflexión
Cuando culpas a tu cónyuge o pareja, puedes dar lugar a que ambos se sientan enojados y resentidos el uno contra el otro. Culparse mutuamente pone a ambos en una posición defensiva. Ninguno quiere admitir que está equivocado. Entonces, en lugar de culpar de inmediato a tu pareja, da un paso atrás y observa el rol que tú desempeñas. ¿Qué cosas puedes controlar? ¿Qué puedes cambiar sobre la situación? Al reflexionar sobre tu propio rol, podrías ver una perspectiva diferente que puede llevar a resolver el problema de una forma más tranquila. Una pizca de humildad autoreflexiva puede prevenir muchos conflictos.
Reclamos frente a peticiones
Reclamar es cuando expresas insatisfacción o molestia hacia tu cónyuge o pareja por algo que puede o no haber hecho. En una relación, esto podría asemejarse a reclamar de que tu cónyuge no lave los platos o no saque la basura. Los reclamos generalmente se derivan de pequeñas irritaciones que notas en tu relación a diario. Este tipo de comportamiento puede ser perjudicial para tu relación si estás criticando constantemente a tu pareja.
En lugar de reclamar, la próxima vez haz una petición. A veces, las pequeñas cosas irritantes simplemente se pueden pasar por alto. Pero cuando es necesario discutir algo, no comiences la conversación con un reclamo. Tómate el tiempo para comunicarle a tu pareja una solicitud específica. Por ejemplo, en lugar de decir algo como: "Nunca sacas la basura cuando está llena", diga: "Oye, ¿podrías sacar la basura cuando esté llena? He notado que ha estado desbordando mucho más últimamente y me encantaría que se sacara antes de que eso suceda”. Al hacer solicitudes, en lugar de reclamos, es mucho menos probable que actives los mecanismos de defensa de tu pareja. Evita un argumento y consigue el cambio que deseas.
Comentarios involuntarios versus responder a solicitudes
Ser intencional puede marcar una gran diferencia entre una relación saludable y una no saludable. Ser intencional significa hacer algo con un propósito. En tu relación, tu pareja hará “peticiones de conexión”. Una petición de conexión es cuando tú o tu pareja hace algo para obtener atención o para conectarse entre sí. Las peticiones de conexión pueden ser no verbales o verbales. Un ejemplo de una petición no verbal sería suspirar, sonreír o guiñar un ojo. Una petición verbal puede expresarse cuando la pareja dice: "No vas a creer lo que me pasó hoy". Las peticiones de conexión se hacen todo el tiempo en las relaciones. Lo importante es cómo respondes tú a estas.
Sin embargo, a veces no prestamos atención a esas peticiones de conexión y hacemos comentarios que no son intencionales en respuesta a la petición de nuestra pareja. Hacer comentarios que no significan nada o no responder a las peticiones de conexión puede ser visto por tu pareja como algo hiriente. Podría pensar que a ti no te importa él o ella ni lo que tiene que decir. En lugar de responder con "Deja de suspirar tan fuerte" o simplemente alejarte, puedes decir "¿Qué está pasando? ¿Estás bien?" La diferencia en la respuesta puede demostrarle a tu pareja que realmente te importa y que deseas conectar. Hacer comentarios intencionados puede aumentar tu conexión, lo que resulta en un matrimonio más feliz y saludable.
Crítica frente a afirmaciones con “yo”
La crítica implica señalar rasgos o aspectos negativos de tu pareja. La crítica frecuente hace que tu pareja ya no disfrute estar a tu alrededor. ¡Imagínate cómo te sentirías si cada vez que alguien hablara contigo, solo señalara tus defectos de carácter! Y si tú señalas con frecuencia sus defectos, tu pareja comenzará a hacer lo mismo contigo, creando un ciclo descendente de negatividad.
En lugar de criticar a tu pareja, intenta hacer estas dos cosas. Primero, practica señalar las cualidades positivas de tu pareja. Cambia tu voz interior para pensar de manera más positiva y expresar rasgos positivos. Si haces esto con regularidad (acumulando interacciones positivas), facilita el manejo de los desacuerdos que puedan surgir. En segundo lugar, intenta hacer una afirmación específica. En lugar de decir: "Nunca te puedo confiar nuestro dinero, ¿verdad?", prueba usar lo que los investigadores llaman "declaraciones con yo": “Sé que has hecho algunos gastos últimamente. Pero cuando gastas dinero no presupuestado sin decírmelo, me asusta y me pone nervioso, y me frustra. ¿Nos podemos esforzar un poco más en hacer un presupuesto juntos y comunicarnos sobre los gastos?” Nota la forma más agradable de iniciar la conversación que mantiene las cosas más tranquilas. Además, observa el enfoque en cómo el comportamiento de tu pareja te hace sentir, y una solicitud específica sobre cómo mejorar que mantiene las emociones bajo control y las líneas de comunicación más abiertas. Las palabras tóxicas que debe evitar son "tú", "siempre", "nunca" y "jamás".
Prueba estas cuatro formas sencillas de mantener el enfoque en ti y en lo que puedes controlar cuando quieres mejorar tu relación.